Para hacerle frente a enfermedad coralina con alta propagación Minambiente emite lineamientos

• “Las comunidades isleñas deben saber que estamos con ellos y que a nosotros
también nos preocupa el estado de los corales y las afectaciones que podamos
tener en ellos por esta nueva enfermedad”: ministra Muhamad.
• La Enfermedad Pérdida de Tejido de Coral Duro hoy afecta a más de 30 especies
de coral del Gran Caribe; es de rápida propagación y cuenta con altas tasas de
infección y mortalidad en las áreas donde se presenta.
• Colombia cuenta con más de 100.000 hectáreas de corales. La mayoría se
encuentran en los archipiélagos de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, San
Bernardo y las Islas del Rosario.
• Los arrecifes de coral prestan una importante cantidad de servicios ecosistémicos
y contribuyen a la protección de las zonas costeras contra la erosión y las
interacciones con otros ecosistemas, como pastos marinos y manglares.

Bogotá D.C. (@MinAmbienteCo). Con el objetivo de
hacerle frente a una de las principales amenazas para los arrecifes de coral que se
encuentran en el Gran Caribe y tomar acciones inmediatas para que la enfermedad
Pérdida de Tejido de Coral Duro no se siga propagando, el Ministerio de Ambiente
y Desarrollo Sostenible implementó tres etapas que deberán seguir las autoridades
locales para mitigar el riesgo de la enfermedad.
En ese sentido, las Corporaciones Autónomas Regionales, Institutos de
Investigación, Organizaciones No Gubernamentales (ONG’s), Academia, Centros
de Buceo y comunidades marino-costeras tendrán que enfocar sus acciones en la
prevención, intervención y monitoreo con el fin de hacerle frente a la Pérdida de
Tejido de Coral Duro, una enfermedad que hoy afecta a más de 30 especies de
coral del Gran Caribe.
Según los expertos, esta afección parece ser diferente, pues es de rápida
propagación y cuenta con altas tasas de infección y mortalidad en las áreas donde
se presenta. Los últimos estudios realizados sugieren que se inicia por un virus que
afecta el simbionte de los corales, teniendo así efecto sobre la actividad patogénica
de bacterias que terminan afectando y matando el coral.

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